Cada pareja tiene la responsabilidad de planificar su vida sexual y elegir un método anticonceptivo que se adapte a sus necesidades.
La anticoncepción no es una decisión que deba tomar solo la mujer o solo el varón, aunque el método sea utilizado por uno de ellos. Por eso es importante conocer las diferentes alternativas anticonceptivas, así como consultar a un médico que avale la elección, considerando las características personales de cada integrante de la pareja.
La elección del método anticonceptivo depende de varios factores:
• La edad.
• El costo económico.
• La eficacia del método.
• Las necesidades y preferencias de la pareja.
• La confianza en cada método.
Por lo tanto, siempre es aconsejable que, antes de elegir un método, se realice una consulta con un especialista.
Aunque en Uruguay la píldora femenina es el método más popular, debemos decir que no es posible hablar del “mejor método anticonceptivo”, ya que cada persona y cada pareja tendrá que evaluar cuál resulta ser su mejor opción anticonceptiva. Por otra parte, tampoco existe un método completamente seguro, sino que cada uno tiene un porcentaje de eficacia que lo hace más o menos confiable.
La medicina indica que el método anticonceptivo debe cumplir cuatro condiciones:
• REVERSIBILIDAD: que posibilite recuperar la fertilidad cuando se desee.
• EFICACIA: que permita evitar la fecundación cuando no se la desee.
• TOLERANCIA: que evite efectos secundarios no deseados.
• ACEPTABILIDAD: que pueda ser aceptado desde las creencias y la historia personal de cada pareja, enriquecida por la correcta información científica.
Con frecuencia los métodos anticonceptivos son mal utilizados por descuido y/o desconocimiento, lo cual reduce en gran medida su eficacia. En este sentido, no basta con utilizar un método anticonceptivo, sino que es indispensable saber usarlo correctamente. De allí la importancia de la consulta con el especialista.